Desde que inició la pandemia por el coronavirus durante el primer trimestre de 2020 se ha acelerado el uso de dinero electrónico, al tiempo que cael el uso de los billetes físicos; a este fenómeno muchos en el campo de las finanzas preconizan como “la muerte del efectivo”. Para muestra está que en septiembre 2021 volvió a crecer el uso de las billeteras electrónicas, alcanzando el récord de 4.9 millones de usuarios registrado en un mes según como lo reveló un informe privado elaborado por Red Link que mide la evolución del dinero electrónico en Argentina.
La cantidad de usuarios de dinero electrónico creció en septiembre último por séptimo mes consecutido, al sumar 400.000 clientes y llegar a casi 43,7 millones. Las cifras indican que los usuarios aumentaron un 0,9% en el mes que, comparándolo con el mismo período del año anterior, es de 11,2%.
«Un tercio de ese total se sumó desde la irrupción de la pandemia de la Covid-19, porque el aislamiento social preventivo y obligatorio llevó a restringir severamente la actividad presencial en el sistema bancario y aceleró el proceso de uso de los canales de internet, tanto a través de la computadora personal en los hogares y empresas, como de los medios móviles: celulares, tabletas y notebooks», arrojó el informe.
Sumado a ello, las aplicaciones para dispositivos electrónicos (APPs) crecieron en septiembre con respecto al mes anterior un 5% y acumularon un aumento de 8% en comparación con lo transaccionado en igual período del año anterior.
También se destacó la expansión del uso de la billetera electrónica con 3,9% en el mes, 315% respecto de un año antes y 361% en el cotejo del total de las transacciones en los primeros nueve meses de 2021 con los de igual tramo del año pasado.
Es así como se alcanzó un récord de más de 4,9 millones de usuarios en el mes, con un promedio de 35 operaciones promedio por cliente. Otro tema a resaltar es que se mantuvo el crecimiento de las extracciones de dinero sin el uso de las tarjetas en los cajeros automáticos (ATM), a un ritmo promedio de 130.000 transacciones por mes.
“Esto responde a la consolidación del proceso de aprendizaje por parte del conjunto de la población, tanto por parte del cliente bancario, como de las entidades que mejoraron y ampliaron sus plataformas, y de la gradual reactivación de la economía”, remarcó el análisis.