Casi todas nuestras actividades diarias dependen de la conexión a Internet, situación que ha venido avanzado drásticamente durante los últimos años, sobre todo por la llegada de nuevos estándares y dispositivos que nos facilitan y ponen a mano la conexión y la operabilidad con las redes
Desde hace un tiempo el Institute of Electrical and Electronics Engineers (IEEE) anunció el estándar WiFi 801.11bf y la tecnología de SENS, realidad que tardará en llegar al menos un par de años, pero que prometen cambiar por completo la forma en la que nuestro router actuará.
Entre las principales novedades, el estándar pretende innovar en las funciones que pueden realizar los diversos dispositivos de comunicación actuales. Por lo que sin importar que esté trabajando en baja o alta frecuencia, este estándar ofrece la posibilidad de detectar hasta cuándo nos movemos o, incluso, nuestra frecuencia respiratoria.
Por su parte, el IEEE pronostica que el estándar llegará a partir de 2024, acompañado de la llegada de la tecnología SENS o WiFi Sensinf que juntos permitirá a los dispositivos emisores de WiFi, tal y como lo hace un router, detectar elementos del entorno gracias a emisiones de baja frecuencia localizadas en un margen de entre 1 GHz y 7,125 GHz. Así, los objetos que interactúen con estas ondas podrán ser identificados por este tipo de redes.
No obstante, este estándar trabajará también a frecuencias superiores a 45 GHz, lo que le permitirá detectar movimientos a corta distancia, e incluso nuestro ritmo de respiración, ya que han prometido que la tecnología dispondrá de una gran precisión. Esto abre la puerta para que nuestro router sirva también como dispositivo de vigilancia, continuando además con las funciones de conexión que habitualmente realiza.
