• Jue. Dic 5th, 2024

Conoce el control remoto de Samsung que no usa baterías

El Eco Remote Control es un control remoto para televisores que en lugar de usar baterías se carga a través de un panel solar en la parte posterior del mismo, además cuenta con carga rápida por USB-C

Al momento en que nos decimos ir a comprar un nuevo televisor solemos fijarnos primero en su calidad de imagen, diseño, y, algunos, en su calidad de sonido, su sistema operativo y su conectividad. No podemos en duda que son características muy importantes, pero con frecuencia las pequeñas innovaciones pasan completamente desapercibidas, y a veces son las que marcan la mayor diferencia.

Es así como la carga por radiofrecuencia que Samsung ha incorporado en el control remoto Eco Remote, que llega junto a sus nuevos televisores este año, aspira a ser una de esas pequeñas innovaciones de las que hablamos.

Hay que señalar que una de las principales características que Samsung incorporó en sus controles remotos para televisores Neo QLED de 2021 fue que estaban fabricados utilizando 28% de polietileno reciclado. Sin embargo, esta no es en absoluto la única innovación curiosa que introdujo en su control remoto más avanzado el año pasado.

Además de esto, el control remoto incorpora un pequeño panel fotovoltaico que permite cargar la batería utilizando tanto luz solar como luz artificial, aunque también se puede cargar a través del puerto USB-C que integra. Según Samsung, la vida útil de la batería de este control remoto es de al menos siete años, por lo que coincide con la vida promedio de un televisor actualmente. Todo esto nos coloca frente al nuevo control que esta marca acaba de presentar junto a sus televisores Neo QLED y MicroLED para 2022, un dispositivo que incorpora una prestación absolutamente inesperada.

Asimismo, el nuevo control remoto Eco Remote es capaz de recoger una parte de la energía que transportan las ondas de radiofrecuencia presentes en el ambiente, como, por ejemplo, las que emite nuestro router, con el propósito de utilizarla para cargar su propia batería.

Lo que persigue Samsung con esta estrategia es contribuir de una forma proactiva al descenso del consumo de pilas para reducir su impacto medioambiental.