El Director de la empresa destacó que “una tecnología habilitante para estas innovaciones son las redes de datos de gran ancho de banda y bajo retardo, pues la teleoperación, sensorización y supervisión requieren de comunicaciones muy rápidas que no pierdan datos en sus transmisiones”
Las tecnologías digitales que se usarán en el futuro inmediato de la minería y los desafíos que hay que sortear para lograr la minería autónoma fueron los temas que el director ejecutivo del Advaced Mining Technology Center (AMTC) de la Universidad de Chile, Javier Ruiz del Solar, trató en el conversatorio “Automatización en minería, tendencias y perspectiva del cliente”, organizado por Enaex.
Durante su presentación, el Dr. Ruiz del Solar se refirió a los avances tecnológicos que se están integrando o que están más próximos a integrarse en minería subterránea: vehículos autónomos, automatización de equipos jumbo y trabajo combinado de maquinaria autónoma, como LHDs trabajando en conjunto con otros vehículos autónomos.
“Se continúa trabajando en la sensorización de minas, lo que permite operaciones como ventilación de galerías bajo demanda y seguimiento de personas mediante sensores (para, por ejemplo, llevar el conteo de personas presentes en un área determinada o detectar tránsito en zonas restringidas). Otras tecnologías que están avanzando son la teleoperación, la que incluso derivará hacia la telepresencia, usando aplicaciones de realidad aumentada y el uso de robots para para mapeo tridimensional, muestreo y exploración de áreas peligrosas para los seres humanos, como minas abandonadas”, agregó del Solar.
Sumado a ello, del Solar destacó que una tecnología habilitante para estas innovaciones son las redes de datos de gran ancho de banda y bajo retardo, pues la teleoperación, sensorización y supervisión requieren de comunicaciones muy rápidas que no pierdan datos en sus transmisiones.
En cuanto a minería autónoma, el académico afirmó que “es muy ambicioso aspira ahora a una mina completamente automatizada, sin trabajadores humanos en ninguna área. Hoy podemos aspirar a un escenario intermedio, que es la ausencia de operadores en las áreas productivas, en el frente de operación”.
Asimismo, recalcó que para avanzar en esta tendencia se deben enfrentar dos desafíos. El primero es automatizar las operaciones unitarias de la mina de 58 operaciones identificadas, actualmente se han automatizado cinco, y algunas de ellas son teleoperadas. El segundo reto es avanzar en la plena autonomía de la maquinaria, para lo que el académico propuso, en el intertanto, el paradigma de minería autónoma colaborativa, intervención humana para resolver las dificultades puntuales que una máquina robotizada no puede resolver por sí misma.