Universal Music Group, uno de los sellos discográficos más grandes del mundo, ha instado a Apple Music y Spotify a bloquear el entrenamiento de modelos de inteligencia artificial debido a que considera que estos sistemas podrían haber sido entrenados con contenidos protegidos con derechos de autor sin obtener los consentimientos necesarios y sin abonar una compensación económica a los creadores de dichas obras. Según unos correos electrónicos a los que ha tenido acceso Financial Times, el sello discográfico ha advertido que tomará medidas para proteger los derechos de sus artistas.
La preocupación de Universal Music Group no es infundada, ya que la inteligencia artificial generativa puede entrenarse con música popular protegida con derechos de autor, lo que podría dar lugar a la creación de música que infringe los derechos de propiedad intelectual. Google, por ejemplo, ha desarrollado un servicio que genera música a partir de texto, pero aún no lo ha lanzado debido al riesgo de apropiación indebida de contenido creativo. Los investigadores de la compañía tecnológica descubrieron que alrededor del 1% de la música generada por la IA era una réplica exacta del trabajo con el que había sido entrenada, es decir, de material protegido con derechos de autor.
Una creciente preocupación de los artistas
Esta no es la primera vez que el sector artístico ha expresado su preocupación por las posibilidades de la inteligencia artificial y su capacidad para eludir ciertas limitaciones que protegen el copyright de sus creadores. En enero, un grupo de artistas demandó a tres compañías dedicadas al arte digital por infringir derechos de autor en el desarrollo de obras artísticas creadas por IA con la herramienta Stable Difussion. Como resultado, investigadores de la Universidad de Chicago crearon Glaze, una solución que busca proteger las obras realizadas por los artistas y evitar que estas acaben entrenando modelos de inteligencia artificial.
Es importante que se aborden estas preocupaciones en torno a la propiedad intelectual y la inteligencia artificial generativa para garantizar que los derechos de autor de los creadores de contenido sean respetados. Las plataformas de música en streaming y las empresas de tecnología deben trabajar en colaboración con los artistas y los sellos discográficos para garantizar que la IA generativa se entrena solo con materiales autorizados y con el debido consentimiento y compensación económica para los creadores de contenido. De esta manera, se puede mantener un equilibrio adecuado entre la innovación tecnológica y la protección de los derechos de propiedad intelectual.
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