En un mundo cada vez más digitalizado, la ciberseguridad se ha convertido en una prioridad global; sin embargo, a pesar de la creciente demanda de profesionales en este campo, la participación de las mujeres sigue siendo significativamente baja.
En este contexto, la ciberseguridad femenina se ha convertido en uno de los factores a crecer en el próximo 2025, pero para ello es importante acoger las oportunidades y adoptar las acciones necesarias para fomentar una mayor inclusión y diversidad, así lo informó El Diario Estrategia en su portal web.
De acuerdo con las cifras del Talent Trends 2024, en Latinoamérica, menos del 20% de los cargos de liderazgo en tecnología están ocupados por mujeres, siendo Argentina, Chile y México los países con menor participación femenina en este sector.
Estas cifras lo que reflejan es que la representación femenina en el sector de la ciberseguridad en Latinoamérica es alarmantemente baja. A pesar de que las mujeres poseen habilidades y perspectivas únicas que podrían enriquecer enormemente este campo, persisten barreras que limitan su participación, entre las que destacan:
- Falta de Visibilidad: La escasez de modelos femeninos a seguir desalienta a las jóvenes a considerar carreras en ciberseguridad.
- Prejuicios de Género: Los estereotipos de género y la discriminación persisten en la industria tecnológica, afectando las oportunidades de las mujeres.
- Falta de Mentoría: La ausencia de redes de apoyo y mentoras dificulta el desarrollo profesional de las mujeres en este campo.
- Brecha Salarial: Las mujeres en la ciberseguridad suelen recibir salarios más bajos que sus homólogos masculinos, lo que desincentiva su participación.
Ciberseguridad femenina: el potencial de las mujeres en este sector
Las mujeres aportan una perspectiva única a la ciberseguridad gracias a sus habilidades analíticas, su capacidad para la resolución de problemas y su enfoque en la colaboración. Además, su diversidad de experiencias y perspectivas puede conducir a la identificación de amenazas y vulnerabilidades que podrían pasar desapercibidas para equipos más homogéneos.
- Promoción de la Educación STEM: Es fundamental fomentar el interés de las niñas en las disciplinas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) desde una edad temprana.
- Mentoría y Redes de Apoyo: Crear programas de mentoría y redes de apoyo para conectar a mujeres en diferentes etapas de sus carreras en ciberseguridad.
- Diversidad e Inclusión en las Empresas: Las empresas deben implementar políticas de diversidad e inclusión que promuevan la equidad de género y creen ambientes de trabajo respetuosos y acogedores.
- Visibilidad de Mujeres Exitosas: Destacar los logros de mujeres en la ciberseguridad para inspirar a las futuras generaciones.
La subrepresentación de las mujeres en la ciberseguridad es un problema que requiere una solución integral. Al promover la igualdad de género y crear un entorno más inclusivo, podemos aprovechar el talento y la creatividad de las mujeres para fortalecer la seguridad cibernética en Latinoamérica.