Los participantes del arenero prueban operaciones de cash in cash out de criptomonedas, usando cuentas en pesos colombianos
Pese al repunte de la volatilidad de los criptoactivos, la Superintendencia Financiera de Colombia (SFC) adelantó que se sandbox regulado; donde bancos, fintechs y exchanges experimentan con operaciones cripto; sigue avanzando.
Para la SFC un aprendizaje clave que ha dejado el espacio de prueba es la necesidad de reforzar la protección al consumidor, impulsando información clara y precisa que señale hasta dónde una operación es vigilada y cuando deja de serlo. Es por este motivo que están reforzando las medidas de seguridad y transparencia en el espacio.
«Estamos trabajando en un proyecto de circular externa de la Superintendencia. Va a incluir estos aspectos adicionales que las entidades vigiladas deberían exigir cuando vinculen al sistema financiero a estos proveedores de criptos”, afirmó la coordinadora del grupo de innovación financiera de la SFC, Ana María Zuluaga.
Los participantes del arenero prueban operaciones de cash in cash out de criptomonedas, usando cuentas en pesos colombianos.
Con las acciones, también buscan mejorar la prevención de lavado de activos, gestión de riesgos, ciberseguridad y el cumplimiento de los lineamientos del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI).
El invierno cripto solo ha remarcado la alta volatilidad de las criptodivisas, reforzando la perspectiva cauta que el regulador tiene de estas.
“Un bitcoin, un dodgecoin, un ether, en realidad no tienen respaldo y no son concebidos como un activo financiero. En ese punto, pues siempre lo hemos manejado y siempre hemos entendido que, al no tener un fundamental debajo, es volátil”, dijo Zuluaga.
Por su parte, la SFC mantiene su apertura ante los modelos financieros novedosos. Están supervisando un piloto de emisión de un bono tokenizado para el Segundo Mercado, un espacio de compra y venta de valores para empresas pequeñas, utilizando tecnología blockchain.