• Jue. Abr 25th, 2024

¿Sabías que los correos electrónicos generan contaminación?

No es nuevo para nadie sobre la alerta que la comunidad científica ha lanzado a nivel mundial sobre las consecuencias del cambio climático si no se modifican considerablemente los diversos hábitos de consumo. El uso de las redes sociales, la tecnología y específicamente los correos electrónicos también dejan huella de carbono que producen una gran cantidad de contaminación.

Un estudio realizado por la Universidad Autónoma Metropolitana de México (UAM) resaltó que cada vez que se envía un correo se deterioran los recursos del medioambiente. “Cada uno de estos mensajes contamina, por lo que pensárselo dos veces antes de enviarlos puede ayudar a salvar el planeta”, indica el artículo.

Enviar y recibir mensajes importantes a través de estas plataformas es algo muy común dentro del mundo laboral e institucional. Los correos se amontonan en nuestra bandeja de entrada y dejamos para después la eliminación de los mismos.

De acuerdo con “The Guardian” el envío, el filtrado y la lectura de ellos generan una huella de carbono de alrededor de 135 kg., que equivaldrían a “conducir 200 millas en un automóvil promedio”.

Existe una infraestructura detrás de cada mensaje que además de necesitar electricidad para enviarlos, también utiliza energía para almacenar y enviar la información a través de los servidores.

En el artículo de la UAM se indica que un estudio realizado en el año 2017 se estimó que la actividad vinculada por correos mundiales sería lo equivalente a las huellas de carbono que producen 890 millones de autos, sin embargo, esto depende del tamaño de los emails.

Un correo con un archivo adjunto ascendería a 19 gramos de dióxido de carbono (CO2) y en cuánto este sea enviado alcanzará los 50 gramos, indica el diario The Independent.

Por otra, parte los mensajes enviados a través de WhatsApp, los servicios de nube para archivar fotografías, entre otros, también generan gas de efecto invernadero.

Si bien es complejo que el ser humano se aparte de la tecnología, sí se pueden tomar acciones pequeñas para contrarrestar los efectos de la contaminación como borrar los correos innecesario y también los que tengan archivos pesados.