En medio del constante caos y los problemas de movilidad que enfrentamos en nuestras ciudades, surge una nueva propuesta para facilitar nuestros desplazamientos. Keko, una empresa de origen argentino con presencia en varios países de Latinoamérica, ha llegado a México con una inversión de 5 millones de dólares para ofrecer un innovador servicio de carsharing.
El carsharing es un concepto que ha ganado popularidad en los últimos años en todo el mundo. Consiste en la renta de automóviles por períodos cortos de tiempo a través de una aplicación móvil. En lugar de ser propietarios de un vehículo, los usuarios pueden acceder a un automóvil cuando lo necesiten y pagar solo por el tiempo y la distancia que utilizan.
Keko tiene como objetivo proporcionar a sus usuarios la sensación de disfrutar de un vehículo propio sin tener que preocuparse por los costos asociados a su mantenimiento. Arturo Simone, CEO de Keko, destaca que la empresa busca ofrecer seguridad, comodidad y personalización en los viajes de sus clientes. Desde elegir la música que desean escuchar hasta decidir si utilizan el aire acondicionado, los usuarios tienen el control total de su experiencia de manejo.
Uno de los principales beneficios del carsharing es su impacto positivo en el medio ambiente y la reducción del tráfico. Al compartir vehículos, se disminuye gradualmente el número de automóviles en las calles, lo que conlleva una reducción significativa de la contaminación y las emisiones de CO2. Según Arturo, se estima que el uso de carsharing puede evitar hasta 1.6 millones de toneladas de CO2, ya que un solo automóvil compartido puede reemplazar hasta 14 vehículos particulares.
¿Cómo funciona?
El funcionamiento de Keko es sencillo. Los usuarios solo necesitan descargar la aplicación móvil gratuita, disponible para dispositivos iOS y Android, y registrarse proporcionando su identificación oficial, tarjeta de crédito y permiso de conducir. Una vez completado el registro y verificada la identidad del usuario, podrán alquilar un automóvil.
La aplicación muestra la ubicación de los lugares donde se pueden tomar los vehículos y los estacionamientos disponibles para dejarlos al finalizar el viaje. Los precios del servicio son accesibles, con un costo de tres pesos con 40 centavos por minuto, 204 pesos por hora (que incluye 50 km de recorrido) y 1,020 pesos por un día completo (con un rango de 180 km).
Keko inició sus operaciones el 16 de mayo en las zonas de La Condesa, Polanco, Roma y el Centro Histórico de la Ciudad de México. Actualmente, cuentan con una flotilla de 25 unidades, y planean agregar 25 automóviles nuevos cada mes. Además, tienen planes de expansión para ofrecer sus servicios en otros puntos estratégicos de la ciudad, incluyendo los aeropuertos Benito Juárez y Felipe Ángeles en un futuro cercano.
Los desafíos del carsharing
Aunque el carsharing presenta numerosos beneficios, Keko también se enfrenta a desafíos, siendo el estacionamiento uno de los más significativos. En una ciudad tan compleja como la Ciudad de México, encontrar espacios adecuados para estacionar los vehículos puede ser un desafío considerable. Sin embargo, la empresa confía en su capacidad para adaptarse rápidamente y superar este obstáculo para brindar un servicio eficiente y conveniente a sus usuarios.
El arribo de Keko a México representa un paso importante hacia la mejora de la movilidad urbana en el país. Con su enfoque en la sostenibilidad, comodidad y personalización de los viajes, la empresa ofrece una alternativa atractiva para aquellos que desean moverse de manera más eficiente y reducir su impacto ambiental. Con el tiempo, se espera que el carsharing y otros servicios similares contribuyan a transformar la forma en que nos desplazamos en nuestras ciudades, promoviendo un futuro más sostenible y libre de congestión vehicular.