Un tratamiento basado en neurotecnologías es utilizado en pacientes con paraplejía que, dándole la instrucción al cerebro, les permite volver a caminar
Gracias a un implante que estimula la zona de la médula espinal, encargada de controlar los músculos del tronco y las piernas, al menos tres pacientes que habían sufrido lesiones completas de la espina dorsal y que se encontraban parapléjicos pudieron volver a caminar, esto debido a que el dispositivo funciona a partir de una aplicación que incorpora la inteligencia artificial (IA).
La técnica utiliza “paletas de electrodos” que fueron diseñadas específicamente para lesiones de médula fue desarrollada por un equipo de investigadores suizos que forma parte a su vez de un ensayo clínico que aún se está desarrollando, pero que ha demostrado que los tratamientos de estimulación especialmente diseñados para cada paciente, en lugar de otros más generales, resultan teniendo una eficacia superior y actividades motoras más diversas, incluso en lesiones medulares graves.
Según una reciente publicación en la revista “Nature Medicine”, los responsables del experimento, Grégoire Courtine y Jocelyne Bloch, afirman que la estimulación eléctrica de la médula espinal es actualmente una opción terapéutica prometedora para restaurar la función motora en personas con lesión medular.
Sin embargo, aseveran que hasta los momentos se ha empleado sobre todo en terapias de estímulo eléctrico continuo mediante el uso de neurotecnologías “adaptadas”, las cuales fueron diseñadas originalmente para el tratamiento del dolor.
Por su parte, Courtine dijo que los nuevos implantes blandos que colocaron bajo las vértebras en contacto con la médula espinal “son capaces de modular las neuronas que regulan la actividad de grupos musculares precisos”.
“De esta manera podemos activar la médula como lo haría naturalmente el cerebro para estar de pie, caminar, hacer bicicleta o nadar”, puntualizó Courtine.
Fue así como Courtine y Bloch, junto a su equipo de investigadores, crearon y diseñaron una novedosa paleta de electrodos que llega a todos los nervios asociados con los movimientos de las piernas y el tronco, que fue probada en tres pacientes voluntarios de sexo masculino de entre 29 y 41 años de edad.
El equipo explica que combinó esta tecnología con “un marco computacional personalizado, que permitió posicionar con precisión la paleta de electrodos para cada uno de los pacientes y personalizar los programas de estimulación de la actividad”.
Según el equipo, la clave fue insertar un implante más largo y ancho, con electrodos colocados de manera a hacerlos corresponder de forma precisa con las raíces nerviosas de la médula espinal que les permitió acceder a las neuronas que controlan los músculos.
Una tablet envía las órdenes de estimulación a un marcapaso situado en el abdomen del paciente y desde el cual se transmiten los estímulos al implante medular para que la persona se levante.
Con los datos obtenidos se cree que cuanto más pronto se utiliza esta tecnología después de la lesión mejores resultados pueden obtenerse, declaró la cirujana de los Hospitales Universitarios de Lausana.
