En la era digital, la huella digital se ha convertido en una parte inevitable de nuestra identidad. Esta huella está compuesta por los datos personales que dejamos en línea, tanto de forma voluntaria como involuntaria, y puede ser utilizada por cibercriminales para diversos fines maliciosos. Por tal motivo, ESET, compañía líder en detección de ciberamenazas, ofrece algunos consejos para protegerla ante posibles ataques.
Lo primordial es conocer qué es una huella digital y no es más que un rastro de datos personales que todos dejamos al navegar por internet. Estos datos pueden incluir:
- Datos públicos: domicilio, resúmenes de tarjetas de crédito, resoluciones judiciales.
- Datos que generamos: publicaciones en redes sociales, comentarios en foros, formularios que completamos, currículum vitae.
- Datos publicados por terceros: fotos, publicaciones de nuestro entorno, espacios de pertenencia en redes sociales.
Así mismo, esta huella se puede clasificar en dos tipos y son los siguientes:
- Huella activa: incluye los datos que compartimos voluntariamente, como publicaciones en redes sociales o comentarios en foros.
- Huella pasiva: son los datos que se recopilan sin nuestro conocimiento, como el número de veces que visitamos un sitio web o los «Me gusta» que damos en las redes sociales.
¿Por qué es importante proteger la huella digital?
Con los nuevos avances tecnológicos resulta muy sencillo para los cibercriminales lograr una recopilación de los datos que dejamos en internet y más si se deja a su alcance rastros de la huella digital; ya que, así podrían comprometer no solo la seguridad digital de las personas, sino que también su integridad física.
Y es que con la información de la huella digital, los ciberdelincuentes podrían cometer cualquiera de estos delitos:
- Robar nuestra identidad: con nuestros datos personales, pueden acceder a nuestras cuentas bancarias, tarjetas de crédito o incluso suplantarnos en línea.
- Cometer fraudes: pueden utilizar nuestra información para realizar compras fraudulentas o abrir cuentas a nuestro nombre.
- Rastrear nuestros movimientos: pueden saber dónde estamos, qué hacemos y con quiénes nos relacionamos.
¿Cómo podemos reducir nuestra huella digital?
Ante esta situación, ESET recomienda seguir estas buenas prácticas para reducir nuestra huella digital y mantener seguro su rastro en la red:
- Limitar la información que compartimos en línea: no publicar información personal sensible en redes sociales, sitios web o formularios.
- Eliminar información personal de internet: solicitar a los sitios web que eliminen nuestra información o utilizar motores de búsqueda para hacerlo.
- Utilizar una VPN: enmascarar nuestra dirección IP para que sea más difícil rastrear nuestra actividad en línea.
- Revisar los permisos de las aplicaciones: asegurarnos de que las aplicaciones solo tengan acceso a los datos que necesitan.
- Deshabilitar el seguimiento de terceros: configurar nuestro navegador para que no rastree nuestra actividad en línea.
- Evitar que las aplicaciones rastreen nuestra ubicación: desactivar la función de ubicación en nuestros dispositivos.
¿Es posible eliminar por completo la huella digital?
No es posible eliminar por completo la huella digital, ya que algunos datos siempre estarán disponibles en línea. Sin embargo, podemos tomar medidas para reducirla y minimizar el riesgo de que sea utilizada por cibercriminales.
En resumen, la huella digital es un tema importante que debemos tener en cuenta en la era digital. Al tomar medidas correctas para protegerla, podemos reducir el riesgo de ser víctimas de ciberdelitos.