• Mar. May 14th, 2024

Crean neurona artificial que controla una planta carnívora

Crean neurona artificial que controla una plata carnívora

Un equipo de científicos simula con éxito la función de la célula cerebral con materiales orgánicos que se imprimen de forma barata y que se podrían implantar en el futuro en humanos

 

El grupo de investigadores está confiado que en una década será normal tener implantes y sensores cerebrales. La neurotecnología, el campo encargado de desarrollar las herramientas necesarias para interactuar directamente con el sistema nervioso, brinda una increíble promesa y despierta una comprensible perplejidad. Actualmente dio a conocer un nuevo enfoque, una simulación artificial de una conexión neuronal hecha con materiales orgánicos, que permitirá una mejor conexión con las células vivas.

La neurona artificial orgánica tomó el control del movimiento de una planta carnívora y, al enviar la secuencia correcta de pulsos eléctricos a sus células, hizo que se detuviera su mecanismo atrapamoscas. Gracias a este circuito se puede modular los picos de pulso, lo que se traduce en un “resultado positivo” que aporta una nueva opción en la caja de herramientas de los dispositivos que pueden simular funciones neuronales, según investigadores que lo desarrollaron.

“Potencialmente nos permite construir los componentes básicos de nuestro cerebro; neuronas y sinapsis”, afirmó Simone Fabiano, una de las autoras del trabajo.

En el pasado, estas plantas carnívoras ya han sido controladas mediante estímulos eléctricos; el equipo lo usó como modelo porque lo importante era demostrar que sus neuronas artificiales hechas de material orgánico se puede biointegrar con tejidos vivos.

“Las Venus atrapamoscas son fáciles de manejar y, como primera demostración, fueron una elección sencilla. Sin embargo, la posibilidad de modular la electrofisiología de los sistemas vivos mediante neuronas artificiales se puede extender a otros sistemas biológicos y lo estamos estudiando con modelos animales”, dijo el científico de la Universidad de Linköping, Suecia.

Luego de probar su dispositivo en este escenario simple, los investigadores ya están considerando posibilidades futuras, como por ejemplo los implantes cerebrales y la conexión de humanos al Internet de las Cosas (IoT). A corto plazo, se puede utilizar “para detectar, procesar y ordenar una acción específica”, como mover la planta. A la larga, hablan de conectar neuronas artificiales para lograr el aprendizaje automático en las computadoras. “Se podría conectar directamente a redes neuronales biológicas para futuras interfaces cerebro-máquina”, declara Fabiano.

“Todavía estamos muy lejos de la creación de una neurona artificial. Todavía estamos tratando de entender cómo funciona; este es un paso más en el desarrollo de estas herramientas que se adaptarían mejor al cerebro que les de silicio, pero una cosa es le material con el que está construido el circuito y otras que se comporte como una célula real”, concluyó el neurólogo del CSIC Javier DeFelipe.